Madrid, 26 de junio de 2015. Aldeas Infantiles SOS ha preguntado a los estudiantes de secundaria por sus preocupaciones más importantes con una encuesta que trata de hacerles conscientes de cómo son y del margen de responsabilidad que ya tienen sobre sus reacciones y comportamientos.

 

A los adolescentes españoles les preocupa el bullying, así lo han puesto de manifiesto en la encuesta que Aldeas Infantiles SOS ha pasado a un total de 2.863 estudiantes de secundaria de todas las comunidades autónomas. Cerca de un 40% señalaron que “las relaciones de acoso, competencia o bullying” son las que más les preocupan, en una pregunta que les ofrecía también como respuestas las relaciones amorosas, las de amistad o las de aislamiento (que alguien no se relacione).

Por otro lado, más de un 56% de los encuestados afirma que cuando ve a un compañero pasarlo mal “intento darle ánimos o acercarme de alguna forma”. Un 20% se vuelca con este compañero “si es su amigo”, un 14% no suele hacer nada pero la situación le incomoda y un 10%, al ver que el dolor es ajeno, tampoco hace nada y siente cierta indiferencia.

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Ante una situación injusta, los estudiantes protestan. En un 54% de los casos expresan su desacuerdo, pues lo comentan con sus compañeros o les sale “la vena reivindicativa”. Sin embargo, es un 22% el que afirma que “intenta hacer algo” siempre y cuando el motivo “sea cercano”. Si la injusticia que ven es algo que ocurre lejos, tan solo el 4% revela que se informa al respecto. Un 16% de los estudiantes se siente impotente ante la situación y se frustra. Casi el 4%, no reacciona de ninguna manera.

 

Esta encuesta se enmarca dentro del programa de educación en valores de Aldeas Infantiles SOS llamado “Párate a pensar”, que la ONG edita en colaboración con Ecoembes, la organización sin ánimo de lucro dedicada al reciclaje. En este curso escolar el material ha estado centrado en el concepto de la atención, un aspecto que engloba otros como la empatía o la solidaridad, puesto que se estudia desde el punto de vista de la atención a uno mismo, a los demás y al entorno. En el pasado curso escolar, 151.200 alumnos de 1.512 institutos de toda España trabajaron con este material que trata de fomentar la reflexión y el pensamiento crítico y eligieron un representante por Comunidad Autónoma para participar en Madrid en un encuentro de debate donde poner en común con otros adolescentes sus conclusiones.

Así se ven los adolescentes

La encuesta realizada ofrece también una radiografía de otros aspectos que rodean la vida de los estudiantes de secundaria. Ante la crisis económica y las posibilidades de futuro que se les plantean, los jóvenes se muestran optimistas. Casi un 58% contestó la opción “ya veremos, tengo que seguir avanzando” y cerca de un 20% aseguro que “siente infinitas” sus posibilidades de futuro. Solo un 4% cree que “no parece que tenga demasiadas posibilidades”.

Por otro lado, en contra de lo que a veces pueda parecer, los chavales no suelen admirar a otros jóvenes porque sean populares o salgan en televisión (6%). Un 24% asegura no admirar a nadie de su misma edad, pero los que sí lo hacen, suelen valorar la capacidad de salir de una situación dolorosa (24%) o conseguir cosas importantes siendo tan joven (21%). Las buenas notas o la iniciativa las valoran con un 12% cada una de ellas.

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Aunque, de forma mayoritaria, sienten que los adultos les respetan (35%), cerca de un 20% de los encuestados creen que están sobreprotegidos, un 18% opina que “me meten demasiada presión” y un 15% se queja de que “me sermonean o me riñen”. Un 11% de los encuestados han señalado respuestas que denotan la ausencia de una relación sana entre chavales y adultos: “pasan de mí, como si no existiera”, “como si no valiera nada” o “como si fuera un delincuente”.

 

Si pudieran hacer un sueño realidad, el 28% de los jóvenes pediría aprobar el curso y un 22% optaría por tener una tarjeta de crédito sin límite. Parece que grandes deseos de independencia no tienen, pues solo un 7% pediría vivir independiente de su familia. Casi un 12% elegiría que se pudiese usar el móvil en clase. Sin embargo, a la pregunta “Crees que no podrías vivir sin…”, solo un 5% eligió el teléfono móvil. La mayoría lo tuvo muy claro en esta pregunta: no podrían vivir sin una familia el 74% de los alumnos y sin sus amigos un 17%. Sí podrían vivir si les faltaran las nuevas tecnologías, pues el correo electrónico y las redes sociales son imprescindibles para sobrevivir solo para un 4%.