Hoy en día todo cambia, y la coloración, también. Ahora, las tendencias del mercado apuestan por el cuidado, el respeto y la sostenibilidad, ¿quién no busca productos menos agresivos con el cabello y con el medio ambiente? ¿Quién no pide que su tinte evite el amoníaco y el PPD? Las coloraciones ahora dan prioridad al tratamiento y al cuidado.

Éclat, coloración demipermanente

Estos días he descubierto y probado ÉCLAT, la coloración demipermanente de pH ácido de Montibello que transforma el color en un tratamiento. Sí, has leído bien, demipermanente, no es semipermanente ni permanente. La demipermanente, con formulación de origen vegetal, libre de oxidantes y amoníaco, y con pH ácido, hace que el pigmento se coloque en el exterior y sutilmente en el interior de la fibra. No modifica la melanina natural. Y dura unos 15 o 25 lavados.

El pH ácido permite desarrollar el color de una forma más suave, confortable y respetuosa con el cabello, ya que no necesita abrir la cutícula, porque no deposita el color en la capa más externa.

El color se consigue gracias al AMP, un sustituto biodegradable del amoníaco y de la MEA, activa el pigmento sin alterar la estructura del cabello.

El tratamiento se consigue por su combinación de ingredientes, 90% de ingredientes naturales, y entre ellos la Vitamina C, altamente antioxidante como sabemos, y que le aporta brillo.

Montibello eclat coloracion sin amoniaco

Sus envases son sostenibles con hasta un 100% de plástico reciclado.

Os recomiendo ir a un salón que trabajen con Montibello y pidáis, Éclat, porque os va a encantar. En mi caso, han cubierto la parte de la raíz con Denuée, que es un tipo de coloración permanente con amoniaco, y  el resto del cabello ha sido tratado con Éclat, matizándolo y tonificándolo.  Y ojo, que Éclat es un tratamiento express de 20 minutos. En ese tiempo, rellena, refuerza y repara la fibra capilar, y aporta color y brillo al mismo tiempo. Para muestra un botón, os enseño las fotos del resultado en mi pelo.

Más información: Éclat de Montibello